No hay preocupaciones en los hombres ellos sólo piensan en las cosas que quieren hacer y se atormentan por lo que no son y lloran y lloran y son malos para aceptar el dolor y transitar la amargura mientras que una anda por ahí tratando de ser un hombre y leer como un hombre y escribir como un hombre porque ellos lo hacen todo bien porque el mundo está hecho a su medida y es una medida que nos enseñaron es más grande que nosotras pero en realidad es chiquita y no cabe el peso de tener que planificar y tener que inyectarse hormonas desde los quince porque a los médicos no les interesa incomodar a un niño la medicina es una práctica muy arcaica como cuando me sacaron las cordales de abajo y sólo martillan y sacan pedazos chiquitos de diente partido cómo puede ser que en este siglo la forma más eficiente de sacar las muelas sea rompiéndolas en pedacitos me parece inconcebible por eso no me he sacado las muelas de arriba y la muela izquierda ya casi acaba de salir por completo ojalá no me tuerza mucho los dientes aunque de pronto me queda bien la dentadura chueca me da miedo tener caries pero me gusta mucho el dulce como los bonbombunes y el chocolate también los ponqués pero sobre todo cuando son húmedos y no tan esponjosos un día descubrí una canción de Sophia Loren y es muy bonita yo no sabía que cantaba, me recuerda a Nancy Sinatra o a Vashti Bunyan y también a Janis Joplin, será que las mujeres si sabemos hacer las cosas mejor que los hombres, hay que saber dudar de una misma y eso me lo enseño mi papá porque es hombre, los masones se reúnen y hacen rituales como de simbología muy bonitos y lo que sea pero la verdad es que son reuniones de viejos cacrecos donde hablan de las cosas que saben porque son hombres y tienen que sentirse reconocidos porque o si no lloran pero por alguna razón quiero caerles bien a todos y que les guste lo que hago de pronto escogí el énfasis en prácticas porque no tengo que producir obra y eso me salva de que no me critiquen pero no es cierto en proyectos tengo que pensar y tener una opinión igual que un hombre pero no soy hombre igual que una mujer como Carolina o como M o como mi mamá como mis amigas o como Carolina Sanín que me cae muy bien y es muy chistosa y le gusta caerle mal a la gente sobre todo a los hombres e insultarlos y no le gustan los escritores colombianos aclamados por el resto de hombres colombianos como Hector Abad jajaja me da mucha risa y me cae muy bien cuando leo una habitación propia Virginia Woolf también me hace reír mucho y también se burla de esos señores que opinan cosas sobre las mujeres con ningún otro mérito más allá de no ser mujeres y dice cosas tan inteligentes como que las mujeres necesitamos una habitación propia y es verdad necesitamos tener una cama y paredes para decorar como queramos y poner los libros que se nos de la gana en los estantes y tener matas como un pizarrón o un sorcilicio que son para la buena suerte ahora parece que odio a los hombres y no es cierto si toda mi vida he vivido en conflicto por amarlos pero recorro la rabia y se las digo cada que puedo porque ellos no tienen que planificar y su placer no está mediado por el sacrificio de la carne, ellos van ganando la carrera del placer y los odio y los amo.