Había una vez un pingüino que estaba cantando en un espacio con sus conocidos las focas, todos felices los 4 como Juan Luis Londoño, alias el Bonito Boy. A veces las cosas insólitas están en la sencillez… que lo dificulta todo, ya que de ella salen cosas inexplicables. Pautas fáciles e inalcanzables y tan gigantes que los habitantes viajan con un jet a Cali, ni donde las abejas bailan al son de la salsa, el sol en lo alto es testigo del nuevo día en el que Jesús volvió al espacio de pecado. Sigo pensando en el asesinato de esa inocente joven… ¿inocente? Nunca, la inocencia es inexistente. Aunque la infancia nos da la ilusión de que es posible, en el paseo de la vida esa ilusión es abandonada… No obstante, deseo la inocencia, su ingenuidad y ante todo su paz. En los días en los que Pepe el salchicha fue a la capital, casi ve al actual león chino de plata, de eso estaba hecho el espejo de la abuela Leonilde, quien hacía los quesos en unas pequeñas tablas azules iguales a la noche en la que Jack asesinó a Foxy. Los detectives van a Divas y se les olvida su densidad gaseosa que hace de la papaya suave y dulce, donde en el fin de la vía está el palo de guayaba y ya que todos los días sus hojas caen al piso suelta tu pelo liso. Qué feo que se siente cuando nos toca. Y así es que sabes que lo hiciste bien, cuando todo está en el punto ideal y huele delicioso. Pues al final la vida es afín al banquete: si no se ve apetitoso, si no nos levanta el deseo y si no tiene buena sazón, no es algo benévolo. En la batalla de Japón las geishas estaban dejando en alto una lista en oposición de 飲む té chai en la India, cuando se escuchó “El lago de los cisnes“, en una escena se baila con altos y bajos y obesos enanos, los de blanca nieves. Esos cuentos de niños son inquietantes, la de pies de pez se suicida y la bella que descansa fue violada. Bailando fue distinto, había una seño al lado y veía todo cayéndose, cuando todo se despedazaba. Ella cantó un poco de la canción y luego se quedó callada, su voz no sonaba dulce y ese sollozo llenaba el salón.