El pueblo se llama chivor

Descripción larga del día

Pueblo colombiano en la cima de la cordillera central, compacto, de tres a cinco calles en la misma rotonda sin salirse nunca de la vista de la iglesia. En la plaza dos indios que están encontrando una esmeralda, escultura hecha en arcilla probablemente, pero recubierta con una pintura muy barata que podría ser marca pintuco o marca pintucara, pintumala, puntuqueputasesesto. La cara de los indígenas, ardua, dura, pero lo mas sorprendente es que la pintaron de dorado, los indígenas tienen caras doradas. Cuerpos, los cuerpos de los indígenas tienen un pequeño velo, no en todas sus partes, solo en sus respectivos penes y respectivas vaginas. Plumas, los indígenas tienen ambos una pluma en la cabeza, están enganchadas en su pelo largo. Los pies gigantes, pero se sostienen solos. Hay uno agachado, clavando la mirada en el piso, buscando la esmeralda, el otro tiene una esmeralda en la mano en el centro, en el punto cero, cósmico. La esmeralda hecha de arcilla o de plástico, cualquier cosa. El pueblo se llama chivo, chivos, chivor, chivorio. Pero todo eso con mayúscula todos los nombres con la misma posibilidad de representar a los chivos; pero nadie sabe porqué, porque aquí no hay chivos sino esmeraldas. Acá se buscan esmeraldas. El sacerdote esta dando una misa con los parlantes que le prestaron los muchachos de la discoteca o del lugar donde se reúnen a celebrar la llegada de la esmeralda. El sacerdote se robó los parlantes. Es muy probable que el sacerdote se llame Humberto o José, o Rodrigo o Ernesto o Héctor. No sabemos con quien habla el sacerdote, el sacerdote esta dando la misa en la iglesia vacía. Los cantos son las reproducciones favoritas de H,J, R, E o H en YouTube. Sorpresivamente hay DIRECTV en Chivor, también hay claro y probablemente Etb pero no hay casas ni almuerzo, ya se acabaron el pescado y el cerdo triturado. En Chivor venden de toditos bbq y chocorramos vencidos, pero todo a menos de 5 mil pesos. En chivor la gente habla chivoriano, la gente se viste chivorence y todos bailan al son del chivo, pero acá no se visten con chivos sino con ruanas. En chivor hay lotes vacíos para construir casas, también hay un hostal que se llama hostal anny pero también se llama hostal anni. En chivor no se sabe quien es quien, pero se sabe que a las 8 el sacerdote evoca a los demonios de la humanidad, a las 8 se habla sobre el fin del mundo, a las 8 se canta Te presentamos el vino y el pan, a las 8 los cuchos salen a airearse los cuerpos vegetativos, a las 8 no hay pan, pero si hay gaseosa y a las 8 llega Jairo. Jairo se pone mal el tapabocas y tiene una hembra en la silla de la moto, una hembrita con chaqueta de cuero, callada pero atenta, tiene un costal de papas, o de ropa o de zapatos, o tiene las sabanas robadas de la casa de Jairo. La hembrita de Jairo nos mira como quien mira al que no sabe donde está. La hembrita de Jairo nos dice con la mirada que hacen aquiiiiiiiiiii pelaossss váyanse antes de que empiece la fiesta de los chivos. Pero nosotros nos montamos al carro para seguir a Jairo en su moto. Nos deja a la mitad del camino y nos vamos a la intemperie, esperando llegar a un campamento donde nos digan Bueno, pelaos, bienvenidos a las fuerzas armadas revolucionarias de Colombia, y quien es la monita esa que viene con ustedes. Pero nada de eso pasa, solo pasa que llegamos a una mina de esmeraldas y la atravesamos. Estamos con Hugo, nadie sabe quien es Hugo realmente pero el tipo vende esmeraldas. Hugo tiene un lunar al lado de la boca, si se dejara crecer el bigote se parecería a uno de esos compadres de Pablo Escobar. Hugo me da un casco para que no me caiga una piedra en la cabeza, también me da una linterna negra vuelta mierda. Me dice, Niña, póngaselo en el bolsillo de atrás del pantalón, y yo que no Juugo que yo me la pongo en el bolsillo de la chaqueta, y Juugo me levanta la chaqueta verde para ver si tengo un bolsillo en el culo. Me pongo la jueputa linterna en el culo y vamos a buscar esmeraldas. La cueva es mas pequeña de lo que pensé, se siente mortal, pero estos pirobos me dicen vale verga, grabamos y sale, y grabamos y sale, pero antes Juuugo nos tiene que contar la verraca historia de las esmeraldas y de como la esmeraldita es mas bonita si es chiquitica, porque entonces su formita y su cuerpecito y sus pinticas, y después Ay mona, niña, usted, présteme su mano para ponerle la esmeralda. Y yo que no, que no quiero esmeralda. Y Juuugo venga monita, pero présteme esa manito bonita. Y mis amigos pirobos, Oiga Juugo y entonces que mas grabamos, acá solo hay piedra e inframundo básicamente, Chivor es un pueblo inframundico. Pero toca grabar y salir, y entrar y salir y subir y bajar y bajar y subir y atravesar y volver, y caminar y medio correr y reírse y después estar puto por no comer, pero toca grabar y salir de Chivor porque nos comen los chivos, los chivos o el sacerdote. He decidido que el sacerdote se llama Hugo, y todos le dicen señor Juugo, padrecito Juugo, ¿me confiesa? Y he decidido que todos en este pueblo se llaman Hugo, los viejos son el señor Hugo y los jóvenes son el niño Hugo y las niñas son Hugo y sus vaginas son Hugo y sus hermanitos son Huguitos, y todo este puto pueblo de los chivos los engendró un tal señor Hugo hace muchos años, junto con una india muda que no podía hablar, pero se lo tuvo que culear porque ella quería quedarse con su esmeralda.

Descripción corta

Cuando uno ha recorrido unas tres horas de camino, después de pasar Machetá, Chocontá, Guataqué, uno ve un aviso amarillo que dice Laguna de las Esmeraldas, y entonces uno no baja por ahí, uno sigue derecho hasta encontrar un cartel de ron aguardiente antioqueño que dice bienvenidos a Macaná. Macaná no existe, tampoco existen las tildes, solo existe la laguna. Cuando uno la ve uno tiene delirios de Kentucky o de Wisconsin y uno siente que es gringo y tiene una lake house donde se están haciendo hamburguesas de carne 100% de res. Uno ve la laguna y camina entre piedras lagunosas, como las de las películas, como las de las de Wisconsin y Kentucky y North Carolina, y entonces pasa la familia de tres paddling en los kayaks o en las tablitas esas de surf, parados con sus mallas microfibra microsport microamerican y el hijo que probablemente se llama Jake o Martin, acostado en la tablita, con un chaleco gigante viendo a sus padres paddling y comiéndose una paleta, mientras los papas le dicen que ya casi llegan a la casa a ver a Darth Vader y a caramelizar la cebolla. Pero en la orilla del rio estamos mis amigos y yo pensando como probablemente el carro bomba azul de Miguelito no va a subir otra vez por esa colina llena de matorrales y entonces nos toca volver a la casa en un rápido del Carmen.

Conversación con mi madre

Mamá: Hola sofi ¿como te fue?

Yo: Bien ma todo bien

Mamá: ¿Alfin adonde fuiste?

Yo: A la montaña ma, a la montaña

Mamá: Duraste 18 horas en la montaña María Sofía

Yo: Si ma, se nos desarmo la cámara en la mitad y tuvimos que buscar las partecitas por toda la montaña

Mamá: María Sofía dime la verdad, tu no estabas en la montaña, estabas en la casa de tu amigo Antonio cierto

Yo: No ma, que estaba en la montaña, que estuvimos en la montaña todo el día

Mamá: ¿Y que tanto hicieron en la montaña?

Yo: Nada ma, parchar y eso en la montaña, todo bien ma

Mamá: ¿Como así que todo bien, tu crees que yo te voy a creer que estuviste en la montaña todo el día parchando y todo bien?

Yo: No, ma, que la montaña era muy grande tuvimos que caminar mucho.

Mamá: Y donde queda esa supuesta montaña

Yo: Ma, en Boyacá

Mamá: ¿¿¿¿Te fuiste a Boyacá María Sofia????

Yo: Si, ma

Mamá: MARIA SOFIA, tu crees que la pandemia es un chiste?

Yo: No ma, pero era una montaña

……

Mamá: Bah, hasta mañana María Sofía, pero mañana hablamos bien porque tengo que hablar muy seriamente contigo

Yo: Bueno Ma

….

Ma

Pssst..

…..

Ma

…..

¡¡¡Que!!!

….

Quiero ser guerrillera

…….

Palabras que no quiero que se junten

Indios desnudos y montañas desnudas

Jairo y su hembra, y gaseosa

Casa y rápidos del carmen

Murciélagos y esmeraldas

Chocorramo y detodito

Sacerdote y YouTube

Hugo y jugo de mora 

Chicarrón y plátano

Chivos y ruanas

Chivor y noche

Hugo y mi culo

Palabras juntas, muy mal juntadas

En mis sueños la montaña estaba mas desnuda

Que el indio que había visto desnudo en la vigilia

Imagen intrépida, inclemente, ¿cómo te atreves a representarte en mi?

La discordia que me causaron no tiene representación

Y entonces veo en el recuerdo

la luz de Chivor

Ay de las pobres almas que no pudieron ver a Jairo con su hembra

Semejaba ella a una leona dando a luz,

En aquella moto negra donde sentados juntos

sus cuerpos compartían la gaseosa de mil

Que habían tan gratamente comprado en la tienda alfin

¡Ay de quienes no siguen a Jairo en su moto con su hembra dando a luz!

Que son ellos como protagonistas de profundo azar,

Su imagen traspaso mi paz

La noche bella compartida entre murciélagos y luz, demonios y esmeraldas

Ay del cuerpo afligido que no tolera el brillo de las esmeraldas del señor Hugo

No quisiera yo que se fuera sin tocarme el culo,

Que me lleve a su casa

Que me transporte en bus

Pero que me lleve a pensar en chicarrones chivorianos,

pues no hay nada mas bello que pensar en tiempos mejores

Cuando los indios buscaban esmeraldas con sus anos