Por: Carlos Gustavo Mora Cote
¿QUE ES?
En una de las ocasiones en las que nos adentramos en las ruinas, mi padre me contó una historia. Habíamos llegado a lo que parecía una gran muralla compuesta por ladrillos lo suficientemente distintivos como para vislumbrar que la edificación que alguna vez yacía en dicho lugar era más antigua que las que la rodeaban.
Un gesto de lo que parecía nostalgia apareció en el rostro de mi padre al tocar los grandes ladrillos que la componían. Al verlo, le pregunté:
¿Qué es este lugar?
Antes de la gran guerra, este lugar fue alguna vez un museo, un gran edificio que guardaba objetos invaluables, como una colección de curiosidadessin uso alguno.
¿Si contenía objetos invaluables, por qué se encontrabanaquí?¿Por qué guardaban y valoraban esos objetossin ningún uso práctico?
Se encontraba aquí por razones simbólicas; esta zona era tan antigua como algunos de los objetos que contenía. Su propósito era informar, conectar el presente con el pasado a través de las historias unicas que acompañaban dichos objetos.
¿Qué quería decir con respecto al pasado? ¿Por qué se necesitaba esa conexión?
Para conocer, hijo, para evitar lo que ya ha ocurrido, el olvido. Este lugar buscaba impartir a sus espectadores reverencia por el pasado y conocimiento para el futuro.
¿Para quién fue creado? ¿A quién se le impartía dicho conocimiento?
A cualquier persona que quisiera escuchar; la historia que este lugar representaba era colectiva.
¿A quién representa con esa historia colectiva? ¿Quién nutría ese conocimiento?
Intentaba representar con su mejor habilidad a todos, las culturas miles de años antes de las grandes ciudades y los individuos de lasmismas, personajes de guerra y de la paz, de prosperidad y ruina.
¿De qué modo estaban representados? ¿Qué narrativa pretendían contar?
Fue diferente a lo largo de la historia, pero antes de caer en la ruina, este museo intentó describir hechos y objetos de la forma más objetiva posible, con un énfasis empático hacia las comunidades más marginadas o poco representadas habitualmente.
¿Qué se veía? ¿Qué se sentía? ¿Qué se olía? ¿Cómo era caminar por un lugar así?
Se veían fragmentos del pasado en islas de historia a lo largo de grandes salas, desde rocas del espacio hasta armas de conquista, e incluso tejidos realizados por niños, todas acompañadas por extensas explicaciones que buscaban justificar su existencia allí. Por medio de una energía llamada electricidad, se alumbraban las escenas con música o sonidos sacados de su contexto, del tiempo; una experiencia sorprendentemente sensorial aunque no se pudiera tocar mucho.
Me pregunto quién fue el encargado de organizar dicho lugar y si tenían razón en mostrarlo de dicha manera…
Seguramente personas alejadas de dicho contexto circunstancialmente, pero cercanas por medio de empatía y estudio. Cargadas con la tremenda responsabilidad de dar voz a culturas ya no existentes o en peligro de desaparecer.
¿Qué opinabas tú de dicho lugar, padre? ¿Cuál era tu posición?
Sentía una gran inspiración al entrar en lugares como este; existían muchos y siempre resoné con su labor. Por esto, te cuento lo que este lugar significó, como un fútil ejercicio de recordar lo que aún nos queda después de tanto.